Colonia de Santa Apolina

Colina de Santa Apolonia

Descripción

A sólo 200 metros de la Plaza de Armas de Cajamarca, y 764 metros sobre el nivel del mar, está la Colina de Santa Apolonia, este lugar es el mirador natural de toda la ciudad de Cajamarca. El cerro es un afloramiento (elevación natural) de roca tobácea traquítica de color blanquecino y dureza media. En ella podemos encontrar una capilla en honor a Santa Apolonia, además de los bellos jardines de sus alrededores. Al estar ubicada en un cerro (el Cerro Santa Apolonia), la Colonia de Santa Apolina cuenta con un graderío desde las faldas hasta la cima del empinado cerro.

La Colonia de Santa Apolonia queda a 200 metros de la Plaza de Armas

Historia

    

La gradería del Cerro de Santa Apolonia

En la antigüedad se construyó una plataforma en la cima y algunas estructuras subterráneas que al parecer servían como tumbas.

A partir del siglo VII a.C. , y durante todo el desarrollo de la civilización de la cultura Cajamarca, la colina estuvo dedicada al culto a los muertos. Se construyeron algunas tumbas de personajes importantes, a la vez que se mantuvo el carácter sagrado del sitio. A fines del siglo XIV ,y antes de la conquista de Cajamarca, el cerro aparecía ya como una fortificación. Había sido amurallado y recortado en varios sectores, a la vez que en su cima se levantaban algunas estructuras no muy elevadas. Así la conocieron los españoles. Se dice que allí se levantaba el santuario de la Serpiente, que los Incas respetaron e incorporaron a su panteón. 

En 1560 los frailes franciscanos iniciaron su destrucción, utilizando el material para edificar su iglesia y convento (la iglesia de San Francisco). En 1571 se construyó en la cima la capilla en honor a Santa Apolonia.

Sillas del Inca 

Las Sillas del Inca

Las llamadas Sillas del Inca son dos piedras talladas probablemente durante el período de la cultura Cajamarca, las cuales sirvieron de lugar descanso para el inca quien desde este lugar vigilaba y divisaba su territorio. Segun algunos cronistas, lo que se conoce como silla del inca sirvió para que los sacerdotes del imperio inca realicen rituales o pagos a la pachamama. En noviembre de 1532, las sillas fueron usadas como punto estratégico para la captura del inca Atahualpa.